Le sustituyó nominalmente uno de los consejeros, Antonio Veiga otro allegado al califa de Marbella. De todas formas el hijo del dueño ya estaba en el consejo y era el que tomaba todas las decisiones.
El club había renovado a Sandoval como entrenador la temporada anterior y le dio plenos poderes para formar la plantilla a su antojo. De su mano empezaron a llegar jugadores veteranos que no mejoraban en nada lo que había en el club y cerraban puertas a los jóvenes. Formó una plantilla sin jugadores de banda, como el año anterior y luego se quejó de ello. Así se las gastaba Sandoval, apartando a un jugador del Sporting que llevaba años en el club. Mucho tardó el club en calar a este individuo. Y además le costó caro pues el gran gasto en la plantilla nuevamente no era acorde a la situación económica del club. Este entrenador en ningún momento le importó la cantera, ni hablaba con Abelardo (que era el entrenador del B).
Ese año el club tuvo 18400 socios y una media de asistencia al estadio de 17150.
Temporada
La temporada fue nuevamente muy irregular, a pesar de contar con 2 de los mejores delanteros de la categoría el centro del campo no funcionó en ningún momento y no había juego por bandas para surtir de balones a Scepovic y Lekic. Síntoma claro de lo mal que se había confeccionado la plantilla. Con un ambiente enrarecido en la grada y una afición que no se identificaba con el equipo aunque el club estaba a un sólo punto de la promoción de ascenso se decide cesar a Sandoval en la jornada 37. Le sustituye Abelardo que logra 3 victorias y 2 empates y cae en la primera ronda de la promoción ante las Palmas que demostró superioridad tanto en esos partidos como en los de la temporada regular. Especialmente sangrante, para los que no seguimos al filial al menos, fue el debut de Abelardo ante el Hércules. Colocó de titular a un tal Jony en banda izquierda que hizo un partido descomunal con gol incluido. Se le tenía que haber caído la cara de vergüenza a Sandoval, pero demostró que ni la tenía ni la conocía.En resumen, un año perdido más. Y ni se sabe cuantos van. Siempre en busca de un resultado inmediato sin pensar en el medio o largo plazo. Los fichajes de este año le salieron caro al equipo y al final para nada.
Plantilla
Ese año llegaron al club como fichajes López Garai, Alberto, Isma López y Hugo Fraile más los cedidos Scepovic y Lekic. Los dos delanteros rindieron muy bien, Scepovic hizo una gran primera vuelta aunque luego se desconectó y no demostró mucha profesionalidad en el fin de temporada. También es cierto que Sandoval le desplazaba a banda para dar cabida a Lekic en un dispositivo lamentable. Alberto estuvo 3 años sentado en el banquillo del molinón sin ser capaz de ser una alternativa a Cuellar. Hugo Fraile era un jugador limitadísimo, descarte del Getafe(¿?¿?). Y López Garai fue el peor fichaje que se hizo en muchos años, y no por lo deportivo, que también, si no porque demostró ser un egoista en el vestuario.Dejaron el club ese verano los tres delanteros del año anterior Sangoy, Bilic y David. Bilic se iba finalmente del club, jugador muy querido por su compromiso que fisicamente ya no estaba en su mejor momento. Nunca olvidaremos su compromiso y ese medio año en segunda con Preciado, sus 10 goles que nos llevaron a primera 10 años después. También se iban Gregory, Carmelo y Ricardo León. Además Borja López y Trejo se iban traspasados al futbol francés dejando buen dinero en caja, al menos 4 millones. La baja de Trejo fue una pena porque marcaba diferencias.
Muchos cambios en la plantilla que no se tradujeron en resultados, probablemente porque se invirtió muy mal en fichajes y la plantilla no se compensó suficientemente.
El once tipo de ese año fue el formado por: Cuellar; Lora, Canella, Bernardo, Luis Hernández; Nacho Cases, Mandi, Alex Barrera, Jara/Fraile; Lekic y Scepovic. También disputaron muchos minutos: Carmona, Isma López, Ivan Hernéndez, López Garai y Bustos. El máximo goleador fue Scepovic con 23 goles seguido de Lekic con 12 y Carmona con 7. El equipo fue el máximo goleador de la categoría con 63 goles pero los 51 encajados fueron mucho lastre. El problema no eran los jugadores ya que la defensa era buena, y lo demostraría al año siguiente con creces. El problema era la nula disciplina táctica de Sandoval con un centro del campo que ni atacaba ni defendía y hacía malos a unos centrales que no lo eran y siguen demostrándolo a día de hoy.
Se que es muy oportunista pero nos quedó la sensación de que ese año se podía haber ascendido si se hubiera cesado a Sandoval un par de meses antes y Abelardo hubiese podido currar más tiempo con el equipo. Quizá las cosas hubiesen cambiado para bien y se hubiera pagado correctamente a los jugadores y la liga no habría sancionado al club sin fichar por ello..... Pero eso es otra historia. La realidad es que no fue así y se pagó con creces aunque contra todo pronóstico un grupo de jugadores y cuerpo técnico jóvenes salvó al club, probablemente, de la desaparición al año siguiente.
